El Museo Nacional Arqueológico de Tarragona (MNAT) prorroga hasta finales de verano la exposición ‘La moneda en época de Augusto’

Francesc Tarrats, director del MNAT, a l'exposició 'La moneda en època d'August' / ©Pere Toda-Vilaniu Comunicació
Francesc Tarrats, director del MNAT, a l’exposició ‘La moneda en època d’August’ / ©Pere Toda-Vilaniu Comunicació

«De todas las comunidades de la antigüedad, Roma fue la que hizo un uso más intenso de la moneda como instrumento de comunicación al servicio de los intereses del poder«. Con esta carta de presentación comienza, en el Museo Nacional Arqueológico de Tarragona, la exposición ‘La moneda en época de Augusto‘, visitable hasta finales de verano.

La muestra estaba prevista inicialmente para ser inaugurada en 2014, cuando la ciudad conmemoró el 2000 aniversario de la muerte del emperador. Pero por razones coyunturales, que nada tienen que ver con a fluctuación de los precios de las monedas en los parqués internacionales, la exposición no pudo ver la luz, y fue presentada a finales del año pasado. Como todo lo que suele ser bueno, había que esperar este tiempo para disfrutar del momento. De entrada, y tal y como nos explica el director del MNAT, Francesc Tarrats, la muestra cubre un déficit del museo, como es la numismática. Por este motivo, y aunque la exposición sea de manera temporal, el Museo decidió remodelar la parte del recinto que hoy acoge la muestra, para convertirlo en un espacio más atractivo y reforzar su relato museístico.

La moneda en época de Augusto es selectiva y presenta sólo 79 piezas, propiedad de coleccionistas tarraconenses y catalanes en su mayoría. Ahora bien, la muestra numismática es de un gran valor porque representa la historia del recorrido vital de Augusto, desde el 63 aC, cuando nace, hasta el 14 dC, cuando muere. La moneda en época de Augusto, explica Tarrats, reúne «una selección representativa de las monedas que circulaban en los territorios integrados en el mundo romano en este periodo histórico. Una selección -añade- que en el caso concreto de Tarraco se convierte en exhaustiva, reuniendo por primera vez la serie completa de las monedas acuñadas en la ciudad y, en buena medida, a la memoria de Augusto y al culto a su divinidad, proceso en el que Tarraco fue pionera«.

En este contexto, la muestra se estructura en cuatro grandes ámbitos. La primera del nacimiento de Augusto (63 aC) a la muerte de Julio César (44 aC); la segunda abarca de la muerte de Julio César al imperio de Augusto (27aC); la tercera transcurre del imperio de Augusto (27aC-14dC) hasta su muerte y legado; mientras que la cuarta y última parte de la exposición está dedicada a la ceca de Tarraco, que era la casa o taller donde se fabricaban las monedas en la ciudad, con el visto bueno de Roma. En la muestra encontrarán todas las monedas que se acuñaron en época de Augusto y Tiberio.

Tarrats, a la vitrina que presenta les monedes encunyades a la seca de Tàrraco. / ©Pere Toda-Vilaniu Comunicació
Tarrats, a la vitrina que presenta les monedes encunyades a la seca de Tàrraco. / ©Pere Toda-Vilaniu Comunicació

La muestra comienza con la emisión de las primeras monedas durante el nacimiento, niñez y formación de Augusto hasta la muerte de Julio César. Se trata de la época pre-imperial y tardo-republicana, en la que las grandes familias itálicas controlaban la emisión y «el mensaje», bajo la supervisión del Senado. En este periodo, sin embargo, las monedas no presentan efigies de personas reales, sino iconografía, recuerdos, símbolos o hechos remarcables. No será hasta el final de la República, en época del Primer Triunvirato (Julio César, Marco Licinio Gras y Cneo Pompeyo Magno), que comienza a figurar en una de las caras de la moneda, el retrato de personas reales, aunque vivas y las representaciones de escenarios o hechos históricos de Roma. De esta época es, por ejemplo, el denario de plata de Titus Carisius, del 46 aC, que en el anverso muestra la cabeza de Juno Moneta, divinidad encargada de velar por los recursos económicos del Estado, y en el reverso presenta una corona de laurel, unas tenazas, un yunque, un troquel y un martillo, utensilios imprescindibles para emitir monedas.

Denari de plata de Marc Antoni que rememora la batalla d'Actium. / ©MNAT
Denari de plata de Marc Antoni que rememora la batalla d’Actium. / ©MNAT

En el segundo bloque, que abarca el recorrido de la numismática desde la muerte de Julio César hasta el acceso de Augusto en lo alto del imperio, la moneda refleja «la situación de incertidumbre y convulsión que presidió el mundo romano hasta que Augusto se impone«, como explica Tarrats. Comienza un periodo en el que las monedas se convierten en propaganda, sus imágenes cuentan conquistas y la consecución de nuevos territorios. De esta época destaca un denario de plata de Marco Antonio que muestra en el anverso una galera pretoriana y en el reverso, el águila legionaria entre dos insignias militares. En la exposición se explica que esta moneda decidió acuñarla Marco Antonio en el transcurso de los preparativos de la batalla de Actium. En una cara quedaba patente su condición de triumvir y en la otra, el número de legiones de que disponía para hacer ostensible su poder y poder reforzar la moral de sus tropas. La propaganda no fue suficiente. Marco Antonio perdió esta batalla y acabaría suicidándose, mientras que Augusto allanaba el camino para, ahora sí, levantar su imperio.

En el tercer bloque, la efigie del emperador es el elemento iconográfico imprescindible. El emperador ya es el único que puede autorizar a los magistrados a emitir moneda, ya sean de plata, latón o bronce. En cuanto a las pocas monedas de oro que circulaban, su acuñación quedaba restringida a las secas imperiales, en Roma, y ​​en Hispania, bajo el control de Augusto. De este periodo se ha seleccionado una moneda que hace referencia a un episodio histórico. El Caesaris astrum (Cometa de César), fue observado en Italia durante siete días, en julio del 44 aC, el año del asesinato de Julio César. Este fenómeno fue interpretado como un signo de su deificación -«el alma de César»-, convirtiéndose en un poderoso símbolo de la propaganda política que impulsó la carrera de Augusto. Este cometa se debió desintegrar, ya que no se trata de ningún cometa periódico. Aunque algunos estudiosos la han querido identificar con el Halley, esta apreciación es errónea porque el cometa, en su órbita de cada 76 años en promedio, pasó el 86aC y, posteriormente, el 11 aC. También de esta época es la moneda de oro, un áureo de Tiberio, que muestra en el anverso la cabeza laureado de Tiberio, y en el reverso la cabeza laureado de Augusto.

Moneda que fa referència al 'Caesaris astrum' (Cometa de Cèsar), va ser vist a Itàlia durant set dies, el juliol del 44 aC, l’any de l’assassinat de Juli Cèsar. / ©MNAT
Moneda que fa referència al ‘Caesaris astrum’ (Cometa de Cèsar), va ser vist a Itàlia durant set dies, el juliol del 44 aC, l’any de l’assassinat de Juli Cèsar. / ©MNAT
Auri de Tiberi, que mostra a l’anvers el cap llorejat de Tiberi, i al revers el cap llorejat d’August. / ©MNAT
Auri de Tiberi, que mostra a l’anvers el cap llorejat de Tiberi, i al revers el cap llorejat d’August. / ©MNAT

Y llegamos al último apartado, el que habla de la ceca de Tarraco, una de las más importantes en cuanto a la producción monetaria de la Hispania romana en época republicana. Las acuñaciones del taller de Tarraco abarcan la totalidad de las monedas usuales al imperio (sestercios, dupondios, ases, semis y cuadrantes), y la muestra recoge todas las monedas que se emitieron en época de Augusto y Tiberio. De este tiempo es una moneda con la cabeza radiado de Augusto, en el anverso; y una ahora con palma, en el reverso.

Moneda amb el cap radiat d’August, a l’anvers; i una ara amb palma, al revers. / ©MNAT
Moneda amb el cap radiat d’August, a l’anvers; i una ara amb palma, al revers. / ©MNAT

Finalmente, la muestra ofrece un árbol familiar «del poder», con las grandes familias. También se explica el tipo de moneda que había, la equivalencia que tenían, y los sueldos de diferentes estamentos de vida romana: los altos cargos políticos, los médicos, los funcionarios, los artistas famosos … Unas equivalencias que, bien mirado, hacen pensar que las monedas cambian pero las remuneraciones no, salvo honradas excepciones.

INFORMACIÓN DE SERVICIOS:

Sitio: Museu Arqueològic de Tarragona (Plaça del Rei, 5)
Hora: 12 h. Aproximadamente una hora.
Precio: incluido con la entrada del Museu.
Visitas guiadas: 20 de marzo, 17 de abril, 15 de mayo y 19 de junio de 2016.
Para más información y reservas: 977 25 15 15 / 977 23 62 09 / mnat@gencat.cat

Texto: Ivan Rodon i Tenas (@irodon en Twitter)
Fotografías: Pere Toda (@ptodaserra en Instagram)

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